sábado, 27 de octubre de 2012

Homicidios hipotecarios

Intento buscar buenas palabras para expresar mi descontento, pero los políticos españoles son unos malditos parásitos sin escrúpulos, y creo que me quedo corto con la expresión. Dos suicidios, uno en las Palmas y otro en Granada el día 26 de Octubre, a lo que hay que sumar un intento de suicidio en Burjassot. Mientras tanto, el parásito Borbón de Juan Carlos se dedica a alabar las medidas que se están tomando para reducir el déficit fiscal mientras que a su yerno le descubren otro millón de euros en una cuenta en Suiza. Sinvergüenza es una expresión que no queda a la altura de las circunstancias cuando hay que referirse a un monarca puesto a dedo por un dictador. Parece ser que a esta chusma de personajes les parece bien que la gente se suicide. Puedo pensar que incluso disfrutan cuando reciben una noticia como ésta. Incluso puedo llegar a pensar que se masturban pensando en cuanta gente puede llegar a quitarse la vida al perder todo por lo que han luchado.
Señor Rajoy, podría ser usted el siguiente en quitarse la vida junto con su equipo de gobierno, y si a esa causa se suman los Borbones, banqueros y parásitos sociales que manejan un país como es España, seguramente que la crisis dure menos de lo esperado. El pueblo se ahorraría mucho dinero gastado en despilfarros, lujos y evasiones fiscales que son las causas que han arruinado el país. Podrían unir a la causa también a los presidentes del gobierno previos para ahorrar al pueblo los miles de millones que tienen que pagar en pensiones vitalicias a unos personajes que se han dedicado a convertir el estado de bienestar en una dictadura parlamentaria. Y es que todavía tienen la poca vergüenza de decir que vivimos en un estado democrático, cuando los derechos en la actualidad solo son reconocidos cuando tienes cierto poder adquisitivo. Se están cargando la educación y la sanidad, las pensiones, y han aniquilado a las pequeñas empresas que a duras penas podían salir adelante. Han favorecido únicamente a las grandes corporaciones y a unos banqueros que juegan y siguen jugando con las vida de la gente. Ustedes, que defraudan miles de millones anuales con SICAVs, que evaden miles de millones al fisco, tienen la cara dura de afirmar que los españoles han vivido por encima de sus posibilidades. Tienen la poca delicadeza de decir "que se jodan" cuando recortan las ayudas a los parados. Y tienen la poca vergüenza de decir que el mercado laboral está genial cuando a sus familiares y amigotes les enchufan en empresas con contratos millonarios con los que podrían alimentarse 20 familias. Ustedes, que en su inmensa mayoría están imputados en casos de corrupción, cuando no se encuentran en paradero desconocido. Que viven con todo tipo de lujos y no les falta de nada, que no solo cobran del estado, sino que también cobran de las empresas a las que favorecen con sus legislaciones. Que tratan al pueblo de parásitos cuando la única lacra que está aniquilando la economía son sus políticas de corrupción.
Son cientos de razones por las que deberían ser juzgados por delitos de traición a su patria. Pero ya se encargan ustedes de que las leyes sólo sean efectivas contra los que no tienen nada. Ya se encargan ustedes de encerrar a los jueces que investigan sus estafas y fraudes para que no salgan a la luz.
¿Suenan fuertes mis palabras?. Pues más resuenan las almas de las víctimas que están dejando este mundo gracias a sus medidas de austeridad.

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